CAPÍTULO IV - EL LIBRO DE LAS ALMAS
PRÓLOGO <--Click
Tras los sucesos ocurridos en cima Kun lai, la orden decide embarcarse una nueva aventura. Con sus compañeros Karshten Leóne y Ody Vercetti atrapados en el pasado, el grupo decide iniciar la búsqueda de un legendario y a la vez peligroso artefacto llamado el libro de las almas. Este mágico libro, creado hace años por un grupo de brujos es capaz de conceder deseos a cambio de un gran precio, un alma.
Tras reunirse con los hermanos pandaren, la orden consigue averiguar que la existencia del libro es más que una simple leyenda y que es cierto que existe. Sin embargo el libro ya tiene dueño, una peligrosa maga ha pedido ya varios deseos con este y ha aprendido a usarlo a su favor. La orden formada por Chantalle, Hock, Liabel, la guardiana Thilane y un nuevo miembro Monlee Nieblaoscura, deciden viajar hasta Sholomance, un sombrío lugar donde su enemiga ha hecho uso de los poderes del libro.
Aunque no llegaron a tiempo para darle caza, si lograron averiguar su siguiente destino: Karazhan. La maga se dedicaba a viajar hasta lugares repletos de almas que sesgar para alimentar los deseos del artefacto.
Tras fracasar nuevamente en Karazhan, la orden puso rumbo hacia los bosques argénteos Allí el grupo logró salvar a un peculiar miembro, Frederic Kheerne, el cual había sufrido en sus propias carnes una maldición provocada por uno de los deseos de la maga. Frederic había sido convertido en gato y solo el libro podría salvarlo Otro misterioso miembro se unía a ellos poco después un brujo de clase noble llamado Giordano Lévi, el cual poseía un extraño artefacto con forma de puzzle. Ambos decidieron aliarse con la orden para ayudarles a derrotar a su enemiga.
Mientras tanto, Caleb Vercetti, el guardián de la orden en un lejano futuro aparecía en esta época para cumplir una importante misión. Este se encargó de entregarle a Hock las instrucciones necesarias para reunir las partes que componían un valioso objeto: La baraja de Cuervonegro. Y además consiguió adelantarse a la orden y derrotar a la portadora del libro, dejándola atrapada dentro de este al cumplir el deseo de Caleb de que Karshten y Ody regresaran a esta época. Tras esto, el libro fue arrojado al rió de lava de profundidades rocanegra para que no volviera a caer en malas manos aunque sin antes anular la maldición del pobre Frederic.
Gracias a todos los miembros, la orden consiguió por fin estabilizarse tras meses de viajes y enemigos a los que combatir. Aunque el destino les deparaba alguna que otra sorpresa en los meses venideros.
Más relatos de la trama
La baraja de Cuervonegro
La maldición de Frederic Kheerne
Otros relatos
El Santuario Oscuro
Cartas al viento (Iruam Sheram) (Parte 1)
El despertar oscuro (Iruam Sheram) (Parte 2)
El pasado siempre vuelve (Iruam Sheram) (Parte 3)
Emboscada (Iruam Sheram) (Parte 4)
Traiciones (Iruam Sheram) (Parte 5)
La verdad (Iruam Sheram) (Parte 6)
Renacer (Iruam Sheram) (Parte 7)
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